El Partido Comunista de Venezuela (PCV) condena los ataques del actual Gobierno de Nayib Bukele contra las libertades democráticas y la Paz en El Salvador, las cuales fueron el resultado de grandes sacrificios del   pueblo salvadoreño en  contra de la tiranía de gobiernos serviles a los intereses y dictámenes del imperialismo estadounidense, así como de más de una década de lucha popular armada contra esas condiciones de opresión. 

El actual Gobierno de El Salvador ha iniciado un peligroso camino de ruptura del orden constitucional del país, irrespetando las atribuciones y procedimientos del Parlamento con el objetivo de hacer  aprobar  por la fuerza el reaccionario proyecto de préstamo internacional dirigido a desarrollar su plan de militarización de la sociedad y a profundizar la represión indiscriminada de la juventud salvadoreña, bajo el amañado pretexto de la lucha contra la inseguridad.  

Ante la inviabilidad y rechazo de su propuesta por la mayoría del parlamento, el presidente Bukele ha recurrido al expediente del golpe de estado, promoviendo abiertamente al desconocimiento de la institucionalidad de El Salvador, procediendo a la militarización y toma de las instalaciones de la Asamblea Legislativa por parte del ejército y policía militar.  Desde el Partido Comunista de Venezuela denunciamos el intento de golpe de Estado de la ultra derecha pro-yanqui en El Salvador, a la vez que Condenamos la persecución contra los parlamentarios y dirigentes del Frente Farabundo Martí de Liberación Nacional (FMLN).  

Alertamos sobre esta ofensiva de las fuerzas de la ultra derecha en El Salvador, que amenaza el orden surgido de los Acuerdos de Paz de Chapultepec, firmados el 16 de enero de 1992  en México, y que pueden sentar las bases para el  inicio de un nuevo período de violencia política y social en El Salvador, siendo el único responsable,  el Gobierno de ultra derecha y pro norteamericano de Nayib Bukele. 

El Partido Comunista de Venezuela expresa su solidaridad con el pueblo de El Salvador y con el FMLN, en su lucha por la defensa de las libertades democráticas y los derechos sociales del pueblo salvadoreño.